Partamos de la base de que me da un asco profundo y visceral cualquier cosa relacionada con la religión, sea la que sea y venga de donde venga. Marx ya lo dijo bien cuando acuñó su famosa frase, y más que opio del pueblo es la heroína de los yonquis emocionales. Especialmente el cristianismo. Sí, el cristianismo, esa plaga que lleva asolando al mundo más de dos mil años basada en mitos falsos y en rituales de salón de té. El mismo cristianismo que instauró la Santa (?) Inquisición que costó la vida a miles de inocentes, el mismo cristianismo que intentó conquistar Jerusalén porque "le pertenecía por derecho", el mismo cristianismo que nos habla de abstinencia antes que usar condón cuando al Papa le ponen en su habitación las mejores putas de lujo y un surtido de preservativos con sabor a frutas. La misma religión que idiotiza a miles de pobres desgraciados alrededor del mundo y les sorbe el seso y el dinero, la misma religión que no excomulga ni priva de cargo a los sacerdotes acusados de pederastia. El mismo cristianismo que hace que quiera ir a Roma y prenderle fuego al Vaticano con Ratzinger Z dentro.Dicho todo esto, voy a hablaros en esta ocasión de una aberración llamada THEOCRACY. Con el nombre ya podéis imaginaros de qué van sus letras. No sé qué demonios pasa pero últimamente en los EE.UU. todo el mundo está encontrando al Señor y está contaminando un movimiento que siempre debió mantenerse apartado de cualquier tipo de convicción política o religiosa. Este grupúsculo está liderado por un hombre de Dios llamado Matt Smith (voces, guitarra, teclados, orquestaciones y lo que se tercie), que se hace acompañar de otros tres imbéciles cuyo nombre no vale la pena ni recordar. El señor Smith intenta vender su propia versión del Power Metal melódico (bastante a la europea para ser yanqui, dicho sea de paso) y de paso intentar colar la idea de que adorar a Dios es guay, porque es el Único, nos ama y él dispone sobre nosotros y bla, bla, bla, bla... Mira idiota, ningún ente superior controla tu vida, en todo caso lo harás tú, y si te dejas dirigir por algo así es que tienes menos inteligencia emocional que una patata. Está claro que en casos como este los lavados de cerebro son algo importante.
En fin, tras un vistazo a las letras y después de sufrir arcadas (algunas con vomitona incluida) por fin me pongo a escuchar esto intentando que no se me pegue nada de la idiotez cristiana que esta monstruosidad rebosa por los cuatro costados. Musicalmente me encuentro con un tipo que tiene bastante idea de lo que hace, hasta me atrevería a decir que su talento aún tiene que crecer más. Los sonidos de los instrumentos y la dimensión que se les ha dado me parecen correctos, la producción es relativamente buena y las voces no me chirrían. Incluso tienen un hit single llamado "On Eagle's Wings", pero las letras... Madre mía, las letras son lo más horrible que he leído en mucho tiempo. ¿A quién intenta engañar? ¿Esto es en serio? Es que no puede ser verdad, no me entra en la cabeza que un ser humano adulto y supuestamente racional e inteligente pueda creerse toda esta sarta de gilipolleces. Como dicen los mensajes publicitarios (ya era hora), probablemente Dios no existe (yo estoy convencido de ello), así que relájate y disfruta. Con lo guay que es la cristiandad y cómo debemos buscar refugio en el Señor en nuestras horas más oscuras como tema central me hace dudar hasta de que sepa escribir algo coherente sin meter por en medio lenguaje sacado de referencias bíblicas.
Lo siento pero yo no trago con esto. Igual que no creo en Dios no creo en el Demonio, pero si existe que venga y se lo lleve, más tipos como este no, por favor... Los cristianos no deberían hacer Metal, que se vayan a cantarle a Laura cuánto la aman, pero lo que no es suyo que lo dejen estar.
