Seventh Wonder - Mercy Falls

No negaré que era muy escéptico en cuanto a lo que me iba a encontrar en este disco. No suelo ser un gran fan del Prog Metal salvo en excepciones muy contadas, y me alegra comprobar que esta es una de esas excepciones. Por recomendación de un amigo me decido a escuchar este "Mercy Falls" con la intención de no dejarme impresionar demasiado. El grupo era totalmente desconocido para mí y no sabía de qué clase de grupo de Prog estábamos hablando, sólo sabía que tanto banda como plástico tenían a mi amigo totalmente enganchado y que no podía escuchar otra cosa.

Así pues, decido indagar sobre qué voy a escuchar antes de entrar en materia: SEVENTH WONDER es un grupo sueco radicado en Estocolmo y actualmente formado por Johnny Sandin en la batería, Andreas Blomqvist en el bajo, Andreas Söderin en los teclados, Johan Liefvendhal en las guitarras y Tommy Karevik en las voces. Descubro, además, que "Mercy Falls" es una obra conceptual que narra una trágica historia familiar y habla del destino de un pueblo perdido en los Estados Unidos. A priori no tiene nada que ver lo uno con lo otro, pero id escuchando el disco leyendo detenidamente las letras y veréis que tiene muchísimo sentido.

Le doy al play. El disco empieza a sonar a través de una intro llamada "A New Beginning" donde nos introducen en la historia seguida por una overtura que lleva por título "There and Back" (ambas instrumentales). De momento todo bastante típico y tópico, admirable pero nada destacable. Tercer corte y primer tema propiamente dicho del disco: "Welcome to Mercy Falls". Acaban de impresionarme. El impacto es bestial, no sé si por el desarrollo de la canción, por la voz de Tommy Karevik, los coros tan bien buscados o las líneas de teclado, pero de aquí en adelante tengo que terminar de escuchar esto del tirón. Increíble pero cierto, enganchadísimo desde la primera escucha y deseando que llegue el siguiente tema para ver qué se van a sacar de la manga. De aquí en adelante nos vemos sumergidos en un apasionante remolino musical y emocional (si no me creéis escuchad "Tears for a Father" y luego me contáis) del que no me sobra ningún tema. Por supuesto tengo mis favoritos, pero no me sobra ninguna canción de un disco que para mi ha sido el mejor de 2008 (habría escrito antes esta reseña pero entre la pereza y el poco tiempo pues...).

A nivel de temas yo personalmente me quedo con "Welcome to Mercy Falls", "Unbreakable", "Paradise", "Fall in Line", "Hide and Seek", "One Last Goodbye" (preciosa balada) y "The Black Parade". Ya os he dicho que no me sobra ninguno, pero estos en particular me encantan y no puedo pasar sin oirlos. La instrumentación tratándose de un disco de Prog lógicamente es de calidad indiscutible así que no vamos a entrar en ese terreno porque no hace la más mínima falta. La producción es genial, se escucha todo perfectamente y me encanta el protagonismo que tienen las, por otra parte, excelentes líneas de bajo de Blomqvist en la mezcla final (a mi entender sería difícil comprender el conjunto instrumental sin sus escalas y arrancadas por el mástil). Las guitarras de Liefvendahl de 10, técnicas aunque rebosantes de sobriedad. Los teclados además de tener su indudable parte protagonista contribuyen a enriquecer aún más el conjunto instrumental y las baterías de Sandin son una claqueta, totalmente precisas. Lo que más me ha sorprendido ha sido encontrar un señor cantante como Tommy Karevik, que con su voz es capaz de transmitir multitud de emociones con tan sólo una pequeña matización.

Como conclusión, sólo diré que después de llevar 3 meses escuchándolo prácticamente día sí, día también sigue negándose a abandonar mi reproductor y que acabé por pedir mi propia copia a través de internet. Es un disco que merece la pena tener, escuchar, disfrutar y volver a escuchar cada vez que se acabe. No me pasaba esto desde el "Nightfall in Middle Earth" de mis amados BLIND GUARDIAN. Escuchadlo y si os gusta compradlo, merece la pena absolutamente.