Kraanium - Ten Acts of Sickening Perversity

Extraño lugar de procedencia el de esta banda formada por Grindmaster Flesh en las voces, Gore-Tex y Hacksaw Henry en las guitarras, Ian-Sane en el bajo y Johnny Jawless en la batería: son de Noruega queridos amigos, un país famoso por exportar tipos con la cara pintada de oso panda, el Inner Circle y todo lo que llevaron allí a cabo y por las casi constantes lluvias de la ciudad de Bergen. Imaginad pues mi sorpresa cuando me encuentro con este disco de cara y veo que son noruegos, no muy dados al Death Metal precisamente.

KRAANIUM se formaron en 2001 editando su primera demo, "No Respect for the Dead", un año más tarde. Sin embargo, el proyecto quedó paralizado de ese año 2002 a 2006 por razones que desconozco. Tras este parón editarían sendas demos promocionales en 2007 y 2008 hasta que Pathologically Explicit Records los fichó para editar este primer largo completo del grupo "Ten Acts of Sickening Perversity".

De la carátula al contenido este álbum es lo que promete e incluso un poquito más: si tan sólo te quedas con la información visual que te da la portada puedes deducir que se trata de un disco de Brutal Death Metal y que además pinta bastante bien, pero cuando escuchas lo que viene dentro no sólo hay mucho y muy buen Brutal Death Metal sino que además hay pinceladas de Grindcore repartidas por todo el disco. Es decir: florituras las justas, y si puede ser, ninguna. Olvidad los alardes técnicos, olvidad la gran cagada de DECREPIT BIRTH tras un glorioso primer álbum y volver imitando a NECROPHAGIST. Ni tan sólo formaciones de Death Metal técnico aceptables como MONSTROSITY, HOUR OF PENANCE u ORIGIN se acercan al concepto de estos noruegos. Lo que KRAANIUM proponen está encuadrado dentro de un contexto mucho más cercano a grupos como DISGORGE (USA), BRUTUS o DIVINE PUSTULENCE (con títulos como "Shemale Throatfuck", "Midget Fucker", "Perverted Sensation", "Pentagrandma" o "Zombified Infanticide" no creo que haya nadie que lo dude). Esto es Brutal Death Metal a lo bestia y sin remordimientos, no apto para amantes de la técnica y las vueltas de tuerca que tan sólo hacen que los discos pierdan en agresividad, esa tan necesaria para definir el Death Metal desde una base.

Los diez temas que componen "Ten Acts of Sickening Perversity" (hay un hidden track llamado "Horrendous Torture" al final de la pista 10, los últimos 40 segundos más o menos) son un compendio de brutalidad sonora y una masterclass de mala leche en vena. La producción es bastante clara y todo suena muy coherente, aunque encuentro que la batería debería estar un pelín más alta. Por lo demás, perfecto.

Si os gusta el buen Brutal Death Metal probadlos, os aseguro que no os defraudarán.